Considerando la reciente condición global, donde muchos profesionales tuvimos la afortunada posibilidad de trabajar desde casa hace varios años, o en la actualidad lo requieren hacer. Ahora lo que se requiere es una guía de ayuda para trabajar de forma remota, específicamente en un entorno de cuarentena.
Mantener un horario regular
Establece un horario, y apégate a él siempre que puedas. Tener claro sobre cuándo comenzar y terminar el día laboral ayuda bastante a mantener el equilibrio entre el trabajo y la vida privada. Aunque uno de los beneficios del trabajo a distancia es la flexibilidad, y a veces es necesario trabajar horas extras, sea que se comiences temprano o que te desveles.
Sólo agura de no hacerlo rutinario, y si ocupaste unas horas en la noche, te vendría bien dormir un poco más a la mañana siguiente para compensar el esfuerzo. Ten en consideración saber a qué horas del día eres más productivo. Habemos personas que definitivamente el trabajo lo hacemos mejor cuando todo el mundo está dormido.
Comienza con una taza de café
Si no tomas café no importa, puedes elegir otra bebida. Lo interesante de esto es contar con una rutina para comenzar a trabaja. A mí me funciona una taza de café, hecho de grano recién molido, el aroma me despierta. A otras personas les funciona bien salir a correr.
Eso sí, y me consta, llevo varios años trabajando desde casa, date un baño y usa ropa como si fueras a trabajar un viernes- Una vestimenta casual. Los primeros mese de trabajar desde la comodidad del hogar, sólo usaba mi pijama. Se había convertido en un hábito. Era agradable, sin embargo, te vas acostumbrando y este detalle pueda disminuir el rendimiento.
Haz que respeten tu espacio
No todos tenemos un espacio acondicionado en casa para laboral. En mi caso comencé con el pequeño mueble para computadora que usaba en la universidad. Y lo tenía entre la sala y el comedor, la verdad me gustaba mucho porque veía series mientras trabajaba.
Todo parecía maravilloso, con el tiempo , de hecho lo fue, hasta que las frecuentes interrupciones de mi esposa e hijas comenzaron a inundar mi horario. Papá esto, papá aquello… Tuve que poner un alto, y comenzar a decirles que era horario que lo respetarán. ¿Cómo le dices a una niña de 4 años que estás ocupado? No hay fórmula para ello. Hay que buscar la forma de comunicar que estás trabajando.
Logré ciertas victorias y no me visitaban tanto. Si se suma a esto, las distracciones de la TV, los vendedores de puerta en puerta, los gritos de otros vendedores, el sonido de las campanas que avisan que pasará el carro recolector de basura. Te agotan.
Contar con un espacio dedicado para trabajar
Fui vencido por tres lindas mujeres, así que tuve que buscar un lugar dedicado. Si bien no fue una oficina al principio, si que estaba apartado. En el garage. Las visitas eran menos, y como todo, me fue difícil, me había acostumbrado a las visitas inesperadas de mis hijas. Extrañaba sus interrupciones.
Pinté el lugar de colores suaves y claros para lograr buena iluminación, eliminé la alfombra vieja y sucia, en su lugar colocamos piso, y decoramos con un tapete. Cambié el mueble de estudio de secundario por un escritorio.
después de tres años, tuve una oficina acondicionada, con todo lo necesario para trabajar y concentrarse. Subió mi productividad. Claro, también apliqué otras estrategias que te contaré más adelante.
Tomar descansos
Si cuentas con el espacio dedicado, te concentras tanto en lo que estás haciendo que se te pasa el día volando. Eres productivo y te puedes aplaudir por ello. Al pasar los días, sentirás agotamiento, tensión, una tarea más, por pequeña que sea, la sentirás pesada. Y no la querrás hacer.
¿Por qué? Pasar todo e día, todos los días trabajando causa tensión, y se acumula. No te das cuenta hasta que tienes síntomas tan persistentes que consultarás al médico. Si la causa es el exceso de trabajo, la solución es sencilla.
Tomarse unos minutos para descansar. Por ejemplo, trabajo concentradamente tres horas y me tomo entre cinco y diez minutos para ir con mis hijas, o simplemente tomar el sol, si no hay, respirar aire, dar unos pasos. Esto lo haga cada tres horas. La sensación de fatiga disminuye notablemente.
Muchas veces no es suficiente cinco minutos, más si has tenido semanas con muchos proyectos, seguimientos, conferencias, llamadas, etc., así que estás a punto de entrar en una crisis, te recomiendo que te duermas. Media hora, no más. La siesta me renueva. Me llena de energía para el segundo turno. Es un consejo que seguí, después de leer a Nick Littlehales en su libro Dormir. Prueba y me dices los resultados.
Solicita todo lo que requieres para hacer tu trabajo
Si eres profesional independiente como un científicos de datos, o trabajas por tu cuenta, entonces estarás acostumbrado a solicitar todo lo que requieres desde el principio, por mínimo y pequeño que parezco, para concluir tu proyecto. Si no lo estas haciendo qué esperas. Sencillamente te ahorras mucho tiempo.
Por otro lado si trabajas para una empresa, definitivamente solicita todo lo que te imagines necesitar para llevar a cabo cada una de las tareas. Por ejemplo, si no tienes una computadora y una velocidad aceptable de internet, comentalo con tus jefes, ellos entenderán y juntos podrán llegar a un acuerdo. Otro ejemplo, es tener todo el software indispensable, hay bastantes opciones, tanto gratuitas como de pago.
Existen empresas que que te dan todo, desde el escritorio, los cables, y hasta pagan el internet y una parte del recibo de luz. Puedes preguntar si eso aplica para en tu empresa.
Tener un número de teléfono independiente
Comencé con el celular, no necesité nada más. Sólo que no fue suficiente. Principalmente porque estaba en el garage de la casa y la señal suele ser débil. Otra desventaja fue el que los fines de semana me marcaban para preguntar, para solicitar avances, etc. Así que decidí tener una línea independiente, fija. Me funcionó. Y separé el trabajo de lo personal. Un descanso más.